El COVID persistente incluye una variedad de problemas de salud nuevos, recurrentes o continuos que las personas pueden experimentar después de haber tenido COVID-19.
Cualquier persona que haya tenido COVID-19 puede desarrollar COVID persistente, incluidas las personas que han tenido COVID-19 leve o asintomático. Los síntomas de COVID persistente pueden incluir cansancio, dificultad para respirar, "niebla mental", problemas gastrointestinales, y pérdida del gusto y el olfato, entre muchos otros. Algunas personas que desarrollaron COVID-19 al principio de la pandemia todavía tienen síntomas de COVID persistente, más de un año después de la infección inicial. Decenas de miles de estadounidenses están luchando por controlar el COVID persistente mientras los médicos y los investigadores médicos están aprendiendo más sobre la afección y cómo tratarla.
Un estudio reciente de Israel, actualmente en preimpresión, descubrió que las personas que recibieron al menos dos dosis de la vacuna COVID-19 tenían entre 54 % y 82 % menos de probabilidades de experimentar siete de los 10 síntomas más comunes de COVID prolongado que las personas que no estaban vacunadas.
Vacunarse contra el COVID-19 es la mejor manera de prevenir el COVID persistente.
Encuentre un centro de vacunación contra el COVID-19 cerca suyo:
Visite www.vaccines.gov
Envíe un mensaje de texto con su código postal al 438829
O llame al 1-800-232-0233
Tengo muchas náuseas debilitantes, mareos y ritmo cardíaco acelerado. A veces no puedo comprender las palabras
Isaiah, 26 años
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El COVID persistente me hizo perder la vida que tenía
Katelyn, 20 años
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